Durante un año participaron en diversas actividades como parte del trabajo colaborativo que desarrollan Gendarmería junto a SENDA.
Un total de siete personas privadas de libertad del Complejo Penitenciario de Arica, que se encontraban en tratamiento por consumo problemático de alcohol y drogas, recibieron su certificado de egreso, al concluir con éxito su proceso terapéutico en el Centro de Tratamiento “Volver a Nacer”, que funciona al interior del recinto penal.
La encargada del Centro de Tratamiento “Volver a Nacer”, la funcionara de Gendarmería de Chile, asistente social Pamela Ríos Pérez destacó el esfuerzo, el compromiso, la perseverancia de cada una de las personas usuarias que participaron del proceso y principalmente el volver a creer en ellos mismos, ya que es fundamental para que participen en las diversas actividades que comprende el tratamiento.
Además, la profesional agradeció el apoyo permanente de SENDA y al equipo multidisciplinario que lidera en el recinto penal. “Este egreso representa un hito significativo para el recinto penal, tanto por el logro alcanzado por cada una de las personas usuarias que terminaron su tratamiento y que, sin dudas, evidencia el trabajo y compromiso de Gendarmería en convenio con SENDA, en pro de la rehabilitación y la reinserción social de las personas que enfrentan consumo problemático de alcohol y drogas en contexto de privación de libertad”, puntualizó la profesional.
Por su parte, el director regional de SENDA, Jorge Cannobbio Santos expresó que “cada egreso representa mucho más que el término de un proceso terapéutico; es el inicio de una nueva oportunidad. Detrás de estos siete hombres hay historias de esfuerzo, compromiso y esperanza, que nos recuerdan que la recuperación y el cambio son posibles, incluso en contextos difíciles. Desde SENDA, en este Mes de la Recuperación y durante todos los meses del año, seguiremos acompañando estos caminos, porque creemos profundamente en la capacidad que tiene cada persona de volver a nacer y reconstruir su proyecto de vida con dignidad y propósito de la mano de programas especializados que ha dispuesto el Estado a través de SENDA y sus aliados como lo es en este caso Gendarmería de Chile.”
Durante 12 meses de trabajo, las personas usuarias participaron en un proceso integral que combinó atención terapéutica, acompañamiento psicosocial y fortalecimiento de habilidades personales, sociales y familiares. A través de este camino, no solo enfrentaron la dependencia, sino que también lograron resignificar sus historias de vida, recuperar vínculos y proyectarse hacia un futuro distinto.
Para el Centro “Volver a Nacer”, estos egresos son la evidencia de que la rehabilitación es posible cuando existen espacios de acompañamiento, confianza y oportunidad. El tratamiento constituye una alternativa real, que proporciona herramientas para la construcción de proyectos de vida libres de consumo y orientados a la integración positiva en la sociedad.
